Los abuelos que no quieren morir obsoletos

Estándar

Tienen entre 60 y 80 años, cuando ya tenían la vida hecha y todo aprendido una revolución los dejó perplejos, casi obsoletos: la revolución de la computadora e internet. Ahora, han vuelto a la escuela para aprender lo que los chicos de hoy casi nacen sabiendo: usar internet, el chat, en fin, todo sobre informática. Sus profesores son muy especiales, nada más y nada menos que alumnos de la secundaria que prestan su tiempo y conocimiento para que estos abuelos no se vayan de este mundo sin saber de qué se trata. Niños que enseñan, abuelos que aprenden.

“Mi hija se enteró del curso y me dijo mami andá a inscribirte, y acá estoy, por ahora medio mareada, pero voy a aprender; ella tiene compu pero yo no se la voy a tocar hasta que no aprenda”.

Así, emocionada y con la misma expectativa con la que un chico abre un regalo, Rosa Capuj (76) estaba sentada frente a la computadora en el curso que alumnos de la escuela Ana Guyot de Calzada están desarrollando para enseñarles sobre computación a unos 60 entusiastas abuelos.

Ahora este grupo de abuelos a los que la tecnología los sorprendió con la vida hecha, se ponen  el desafío de aprender de la mano de adolescentes que prestan su tiempo y conocimientos para ello.

“Decidimos continuar un proyecto que surgió de una facultad, desde la escuela el director nos asesoró y desde el centro de estudiantes lo conformamos con tutores para cada persona, para que sea más personalizado. La cantidad de alumnos son bastantes y están muy interesados”, dijo Edgardo Orellano (17) del centro de estudiantes de la escuela.

“Es algo básico lo que le hemos enseñado por ahora, la periferia de la computadora en la primer clase, ahora Internet y luego el chat”, comentó Edgardo uno de los encargados del curso.

El milagro de aprender

A Rosa, que ayer tuvo su segunda clase, le ha gustado mucho el curso. Como muchos otros, lo toma porque “tengo familiares en Mendoza, Córdoba, Paraná, esa es mi intención, es una maravilla; el fin principal es el entretenimiento, ejercitar la mente”.

Junto a ella, Elva Domínguez (72) se dispone a viajar por el mundo desde su Pc. “Yo quiero conocer distintos lugares del mundo y escuchar música”.

Luego dijo que le da apuro preguntarles a los nietos cómo se maneja la computadora y que con el celular también le pasaba de no entenderlo “pero ahora ya lo manejo. Me parece que esto me va costar, quisiera aprender de un momento para otro pero no es así”.

Terminada la clase, a Rafael Romero (65) se le notaba el entusiasmo, tanto, que quería seguir aprendiendo en su casa. “He aprendido a prenderla y el tema del inicio”, dijo sonriendo al preguntarle sobre lo que ya aprendió.

“Hoy vimos Internet, esperemos que me acuerde el viernes que viene (risas). Es muy lindo Internet, mi objetivo es saber usarla, más que todo para chatear con mis hijos que están en Mendoza; en mi casa tengo una compu pero no la sé usar, pero ya le voy a agarrar el gustito”.

La necesidad de aprender

Maximiliano D’Angelo, uno de los tutores de los abuelos en este particular curso, señaló que “buscábamos una relación entre los adultos mayores y los adolescentes, que siempre ha quedado como que los adolescentes son lo peor y los abuelos ya están como desplazados, como que cumplieron su rol; ellos siguen teniendo la necesidad de ir aprendiendo aunque les cueste un poco más, alguien tiene que ponerse y explicarle”.

Así, con los consejos informáticos de estos jóvenes, los cuatro grupos de 60 abuelos, van aprendiendo sobre una herramienta que nació cuando ellos ya tenían todo aprendido.

Daniel Giménez, director de la escuela, dijo que la idea nació porque “trabajamos con la Asociación de Jubilados, ellos son quienes han organizado los grupos y nosotros brindamos el espacio y la inquietud de los chicos, que de alguna manera son los docentes”.

La idea ha prendido tanto que el año que viene piensan en expandirla. Es que los alumnos tienen muchos deseos de aprender.

“Al principio tienen muchos nervios, siempre lo primero que dicen es ‘qué hago’, pero después le empiezan a agarrar la mano fácil; en Internet a lo primero suelen entrar en las páginas de la Anses, la Afip, en los diarios, depende de la persona”, contó Edgardo.

Maximiliano agregó que “tenemos el caso particular de un enfermero que ya cumplió con su rol y dijo que viene a aprender a usar internet porque quiere seguir investigando las enfermedades. Esto les facilita herramientas que antes no tenían”.

Una de las utilidades más comunes que encuentran, es la comunicación vía chat con parientes y amigos lejanos.

“Por lo general todos tiene parientes lejanos, y necesitan del chateo para comunicarse. Hasta ahora siempre necesitan de la mano de otro para poder hacerlo, ahora están entusiasmaos; el año que viene queremos profundizar los conocimientos”, expresó Edgardo.

nota: aclaro (pensé que no hacia falta pero siempre hay una mente retorcida) que el título hace referencia solamente a la parte tecnológica, a la relación de la gente mayor con la tecnología.

La niña más rica del mundo

Estándar

Micaela tiene 11 años. Es de una familia pobre, muy pobre. El día que encontró en su escuela una billetera con mucha plata (para ella más de lo que vio en su vida) volvió a su casa temerosa de que su madre la retara por lo que acababa de hacer: devolver la billetera a su dueño. Esta es la historia (*) de una niña muy pobre en un sentido, pero muy rica en el que más importa.

Micaela tiene 11 años y en su casa viven una situación económica muy dura; por eso, el día que encontró en su escuela una billetera llena de plata y la devolvió, al regresar tenía temor de contarle a su madre lo que había hecho.
Su mamá hoy está orgullosa de ella y la acompañó ayer a recibir una distinción que le entregaron en el Concejo Deliberante por su buena acción.
Micaela Jimena Pagano concurre a la Escuela 1-395 Pedro de Mendoza. Vive en el paraje Los Claveles, del distrito Rama Caída. Hace unos días en el patio de la escuela se encontró tirada una billetera que aparentemente contenía más de $1.000.
Sin dudarlo fue corriendo y le contó del hallazgo a su maestra, quien junto con la escuela se encargó de buscar al dueño, que resultó ser un comerciante de la zona que luego le regaló a Micaela un par de zapatillas que ayer llevaba puestas.
Su mamá, Karina Ancalao, contó que ese día su hija llegó con un poco de temor a su reacción por haber devuelto una billetera con un dinero que, aunque no se sabe con precisión su monto, les hubiera venido muy bien por su complicada situación socioeconómica.

Más ayuda
De hecho, este fin de semana miembros del grupo solidario del Club IKA de San Rafael los asistieron con ropa, regalos y alimentos. La acción solidaria se repitió dos veces.
Micaela, después de ser reconocida en el Concejo, contó que “encontré una billetera con plata entrando a la escuela, no sé cuánta plata había. Fui corriendo a decirle a mi maestra y ella buscó de quién era. No tenía datos la billetera; el dueño me agradeció y me compró unas zapatillas, me siento contenta con esto”.
En su escuela la reacción fue dividida.
Algunos la felicitaron y otros, con la picardía propia de los niños, la cargaron por haber devuelto la plata.
“Algunos compañeros me dijeron que estaba muy bueno pero otros me decían que era una tonta porque la billetera tenía mucha plata”, dijo Micaela riendo.
Orgullosa por ella, su madre, agradeció “a la gente del IKA de la agrupación amigos solidarios, que nos llevaron regalos, calzados y el domingo volvieron a ir y llevaron mercadería, porque nosotros estamos en una condición un poco complicada y vivimos en una casa un tanto precaria”.

 

(*) Nota que escribí y que salió publicada en Diario Uno.

La calle es tuya. Una caminata por el orden

Estándar

Nacida de la red social de promoción de noticias Chuenga, La Calle es Tuya es un movimiento de ciudadanos cansados del desorden en que se producen los reclamos sociales en Argentina. Por eso, este domingo 22, de 18 a 20 horas, convocan a caminar hacia el Congreso para pedir orden en los cortes de calles y rutas. Aclaran que no están en contra de piquetes ni derecho a huelga alguno, sólo piden a los dirigentes que se haga en orden. De su web, podemos leer lo siguiente:

La calle es tuya:

Y de todos. La calle es nuestra, por eso, este domingo 22 de noviembre te invitamos a manifestarte para exigir a nuestros gobernantes que pongan el orden necesario para no perjudicar más a los ciudadanos con la anarquía de cortes de calles.

Manifestate a favor del derecho a huelga por sobre todas las cosas, exigí prevención, información y respeto. La única forma de fortalecer la democracia en un país es que todos nos guiemos con respeto a las leyes y a las distintas ideas y posturas de los demás.

Un piquetero Oficialista dice que va a cortar la calle cuando quiere “y sin pedirle permiso a nadie”, otro»opositor dice que “van a continuar con los cortes Sorpresivos”. ¿Y el resto de los ciudadanos? Presos. Presos de miles de conflictos nuevos, viejos, justos y no tanto. Millones de argentinos sufrimos la imprevisión de todos los actores políticos involucrados sin importar su partido, ideología o puesto.

Te invitamos a salir a la calle el domingo 22 de noviembre entre la 18 y las 20 horas con banderas, camisetas y gorros con los colores argentinos. Sin identificaciones políticas, sin cánticos de ningún signo, sin violencia y con respeto. Una vez, los argentinos tenemos que caminar unidos en el mismo sentido.

La difusión de la marcha es básicamente por las redes sociales. Podés encontrarlos en Faceobook y en Twitter. También aclaran que no están en contra de los piqueteros, como sugirió hoy una nota en Infobae.