El Salto del Angel, en Venezuela, son las cataratas más altas del mundo. Con una altura de 979 metrow es una visión inigualable. Si esa visión se hacde sobrevolando y en 360 grados, el panorama es mucho más espectacular. Gracias a Dima Moissenko, que el año pasado pasó dos días enteros fotografiándola en vuelo, ahora podemos verla como si estuviéramos allí, en el aire, junto a esa caída de agua que llega a tener 807 metros de caída ininterrumpida. El mágico vuelo se puede hacer visitando este link.